Con el advenimiento de la Internet educativa, y
posteriormente de la web, apareció de forma espontánea, como sucedió en otras actividades sociales, el portal. En
este caso el portal educativo. No hay una definición precisa de él, aunque hay interesantes aproximaciones, como el artículo de Rosana López Carreño desde la perspectiva del análisis de la documentación y de los contenidos "Los portales educativos: clasificación y componentes", aunque toma como referencia un modelo que rápidamente se ha mostrado inefiecente, como argumentaremos más abajo: el de las Comunidades Autónomas.
Los portales, desde su inicio, sólo tienen un denominador común: Un lugar en Internet donde alguien o algo ofrecían recursos, experiencias, ideas e informaciones a la comunidad, y lo hacían de forma abierta.
Los portales, desde su inicio, sólo tienen un denominador común: Un lugar en Internet donde alguien o algo ofrecían recursos, experiencias, ideas e informaciones a la comunidad, y lo hacían de forma abierta.
En nuestro país fue ejemplar el portal Platea del PNTIC. Hoy
lamentablemente no se conserva nada de él. Solo su dominio en la url de una serie de
lugares, que quedan dispersos como los restos de un naufragio ¡qué pena! Así
podemos ver los primeros webs de
centros, o de
recursos, o de aportaciones
didácticas,... o incluso de profesores.
Hubo otros portales institucionales. Pero el espíritu de comunidad de
ideas que le caracterizaba al principio se perdió, así como el de apuestas
innovadoras. Se diluyeron en conglomerados de espacios de las comunidades
autónomas, en un reflejo mimético del PNTIC, que se ofrecían a profesores como
si se tratase de juguetes para frikis (juguetes para adultos muy enganchados).
Eso estaba muy bien para los años noventa del siglo pasado. Era innovación.
Pero no para ahora, es un material rancio. No hay propuestas de impacto que puedan
ser asumidas por sectores amplios y significativos de profesores, maestros e
investigadores en educación. El último gran intento es el de la Fundación Telefónica Educared,
con un gran alarde de recursos materiales y tecnológicos, a mi modo de ver
fracasado desde el inicio. No hay criterios aglutinadores a partir de propuestas teóricas o de debates,
ni grandes líneas. Se incluyen a supuestos gurús, no se sabe muy bien merced a
qué criterio, sin referencias a investigaciones, ni a experiencias prácticas
concretas. Todo parece hecho a prisa con criterios de marketing, más propios de una empresa comercial, con urgencia de presentar resultados, más que con fines de
introducir ideas estratégicas.
No ha sucedido así, como es lógico, por otra parte en el
espacio internacional. Voy a citar tres ejemplos muy distintos: En el mundo
hispano se pueden citar dos: Uno privado, Eduteka,
y otro público, CEIBAL:
Ambos cumplen todos los requisitos señalados antes.
Y en el ámbito más global podemos citar otros dos, el OLPC, del MIT, heredero,
hijo y coetáneo no obstante del Media
Lab de Paper y de Solomon. Y por último Edudemic.
One Laptop Per Child (OLPC) es el portal del proyecto del mismo nombre, y adopta la
forma de una wiki. Una apuesta por una forma estándar y participativa. En ella
he tenido mi mejor experiencia de videoconferencia.
Por su desarrollo y acabado tecnológico y… porque estuvo Cynthia Solomon. Aquí
el video de la intervención.
Recordemos el papel que han jugado en la educación con ordenadores el MIT Media Lab y en él Minsky, Paper y Solomon.
Por último Edudemic. Es
digno de considerar cómo de una forma sencilla, extremadamente simple, puede
abordar temas de tanto alcance y de tanto impacto. Lo hace de forma tan
sencilla que se diría que cualquiera lo puede hacer, pero hace falta mucha
maestría para hacerlo que parezca tan sencillo.
Es un sitio de actualidad y tendencias, que mezcla lo mejor
del periodismo-blogger, conciso y crítico, con una panoplia de recursos, y con
opciones de red social. Aunque evidentemente no es un sitio académico, ni
utiliza procedimientos rigurosos, como podemos ver
en la última iniciativa en la que he participado: La elaboración de una
lista de personas con influencia en la educación y en el aprendizaje. Pero
tampoco se lo propone, simplemente da toques de atención sobre los temas. Esto
hace que a veces aparezca con un tratamiento de brocha gorda. Pero ahí está el
discernimiento del lector- participante-usuario.
Esta última lista está hecha con un método `poco riguroso.
Realmente unos pocos votos, con niveles muy desiguales de cualificación (el
mismo promotor reconoció que tuvo que recurrir a los de la oficina de su
empresa para que le votaran), podrían cambiar el orden de los votados. Pero está
claro que al margen del orden estaban los que debían estar, y durante un tiempo
movió globalmente las aguas. Para mí permitió que gente en el panorama
internacional conociese lo escrito en mis blogs y en mis artículos, y para que
la comunidad hispanohablante participase en un grupo global. Pero sobre todo
para dar a conocer ideas críticas sobre MOOCs, una nueva perspectiva de la educación en la
nueva sociedad del conocimiento, y sobre todo las ideas de la personalización
del aprendizaje.
Comentarios
Publicar un comentario